En la operación han sido detenidas ocho personas que formaban un grupo muy jerarquizado especializado en robos por el método del 'butrón', que realizaban con un gato hidráulico y maderas para hacer cuña.
Los Mossos d'Esquadra han desarticulado en Barcelona a un grupo de butroneros muy especializado que robó en comercios de la capital catalana, Terrassa, Alella, Blanes (Girona), Valencia y Murcia, con la detención de ocho personas, según han informado fuentes policiales.
La investigación se inició tras detectar un aumento de cajas fuertes en establecimiento de diferentes puntos de Catalunya, y el operativo permitió comprobar que el grupo estaba muy jerarquizado y especializado formado mayoritariamente por uruguayos y españoles.
La elección del objetivo la realizaban en función de la vulnerabilidad y facilidad para acceder al establecimiento y el posible botín, y una vez escogido decidían el mejor día y hora intentando evitar testigos y obtener un botín suculento, lo que provocaba que muchos robos los hiciesen en fin de semana.
Los miembros ya instalados en España financiaban el traslado de otros individuos de nacionalidad uruguaya, que eran instruidos en la práctica de los robos con butrón, en los que unos accedían al establecimiento y otros realizaban labores de vigilancia.
El butrón lo hacían con un gato hidráulico y maderas que utilizaban para hacer cuña, con los que conseguían hacer ceder la pared de forma efectiva y silenciosa, y posteriormente desactivaban los sistemas de alarma.
El robo en una armería de Barcelona se vio frustrada por la policía, en una acción en la que los integrantes del grupo se querían hacer con armas.
Cinco de los miembros del grupo fueron arrestados 'in fraganti' mientras robaban en una joyería de Barcelona, y poco después también se detuvo a otros integrantes a Castelldefels, donde la banda guardaba las herramientas que hacían servir.
Los Mossos intervinieron un gato hidráulico, una radial, un martillo, guantes, un pasamontañas, niveles, maderas para hacer cuñas, ropa que utilizaban en los robos, herramientas para inutilizar alarmas y forzar cajas fuertes y un parasol para sensores de temperatura.
Los Mossos d'Esquadra han desarticulado en Barcelona a un grupo de butroneros muy especializado que robó en comercios de la capital catalana, Terrassa, Alella, Blanes (Girona), Valencia y Murcia, con la detención de ocho personas, según han informado fuentes policiales.
La investigación se inició tras detectar un aumento de cajas fuertes en establecimiento de diferentes puntos de Catalunya, y el operativo permitió comprobar que el grupo estaba muy jerarquizado y especializado formado mayoritariamente por uruguayos y españoles.
La elección del objetivo la realizaban en función de la vulnerabilidad y facilidad para acceder al establecimiento y el posible botín, y una vez escogido decidían el mejor día y hora intentando evitar testigos y obtener un botín suculento, lo que provocaba que muchos robos los hiciesen en fin de semana.
Los miembros ya instalados en España financiaban el traslado de otros individuos de nacionalidad uruguaya, que eran instruidos en la práctica de los robos con butrón, en los que unos accedían al establecimiento y otros realizaban labores de vigilancia.
El butrón lo hacían con un gato hidráulico y maderas que utilizaban para hacer cuña, con los que conseguían hacer ceder la pared de forma efectiva y silenciosa, y posteriormente desactivaban los sistemas de alarma.
El robo en una armería de Barcelona se vio frustrada por la policía, en una acción en la que los integrantes del grupo se querían hacer con armas.
Cinco de los miembros del grupo fueron arrestados 'in fraganti' mientras robaban en una joyería de Barcelona, y poco después también se detuvo a otros integrantes a Castelldefels, donde la banda guardaba las herramientas que hacían servir.
Los Mossos intervinieron un gato hidráulico, una radial, un martillo, guantes, un pasamontañas, niveles, maderas para hacer cuñas, ropa que utilizaban en los robos, herramientas para inutilizar alarmas y forzar cajas fuertes y un parasol para sensores de temperatura.
La investigación se inició tras detectar un aumento de cajas fuertes en establecimiento de diferentes puntos de Catalunya, y el operativo permitió comprobar que el grupo estaba muy jerarquizado y especializado formado mayoritariamente por uruguayos y españoles.
La elección del objetivo la realizaban en función de la vulnerabilidad y facilidad para acceder al establecimiento y el posible botín, y una vez escogido decidían el mejor día y hora intentando evitar testigos y obtener un botín suculento, lo que provocaba que muchos robos los hiciesen en fin de semana.
Los miembros ya instalados en España financiaban el traslado de otros individuos de nacionalidad uruguaya, que eran instruidos en la práctica de los robos con butrón, en los que unos accedían al establecimiento y otros realizaban labores de vigilancia.
El butrón lo hacían con un gato hidráulico y maderas que utilizaban para hacer cuña, con los que conseguían hacer ceder la pared de forma efectiva y silenciosa, y posteriormente desactivaban los sistemas de alarma.
El robo en una armería de Barcelona se vio frustrada por la policía, en una acción en la que los integrantes del grupo se querían hacer con armas.
Cinco de los miembros del grupo fueron arrestados 'in fraganti' mientras robaban en una joyería de Barcelona, y poco después también se detuvo a otros integrantes a Castelldefels, donde la banda guardaba las herramientas que hacían servir.
Los Mossos intervinieron un gato hidráulico, una radial, un martillo, guantes, un pasamontañas, niveles, maderas para hacer cuñas, ropa que utilizaban en los robos, herramientas para inutilizar alarmas y forzar cajas fuertes y un parasol para sensores de temperatura.
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